La evolución del euríbor, hoy en día, es uno de los factores que más influye en lo que se paga al mes de hipoteca.
Hoy vamos a contarte, en detalle, cómo afecta este índice de referencia a tus cuotas hipotecarias en España.
Pero ¿Qué es el euríbor?
La RAE lo define como “el tipo de interés que se aplica a los préstamos en euros entre los grandes bancos, y que se usa con frecuencia como referencia en los préstamos hipotecarios cuyo tipo de interés es variable”.
¿Cuál es el valor del euríbor?
Una vez definimos lo que es el euríbor, el siguiente paso es saber cómo calcularlo. Y aunque es algo complejo calcularlo por una persona de a pie, el euríbor se obtiene normalmente tras hacer la media de los precios de los préstamos concedidos por los grandes bancos europeos entre sí.
Por este motivo, cada entidad bancaria debe comunicar diariamente su tipo de interés. Tras ello, se eliminan el 15% de las operaciones que tengan el tipo de interés más alto y el 15% de operaciones que lo tengan más bajo. Del 70% restante se hace la media, la cual se redondea hasta los 3 decimales, es entonces cuando tenemos el resultado.
¿Cuándo se publica el valor del euríbor?
De un día a otro aunque lo normal sería que no fluctúe demasiado, sin embargo, su valor se conoce cada día a las 11 de la mañana. No obstante, esta cifra que se da a diario, ni su evolución semanal y/o quincenal, es la que impacta en el valor de la cuota de tu hipoteca. El porcentaje que suelen usar las entidades bancarias en los préstamos hipotecarios de tipo variable es la media mensual del euríbor a plazo de 12 meses.
¿Qué tipos de euríbor existen?
Son 9 los tipos de euríbor, establecidos en base al plazo para el cual se calcula:
- – El que se calcula a diario.
- – El que se calcula a 1 y 2 semanas.
- – El que se calcula a 1, 2, 3 y 6 meses.
- – El que se calcula a 1 año (12 meses).
¿Qué relación tienen el euríbor y las hipotecas?
Pues si tienes una hipoteca de tipo variable, seguramente sabrás que el vínculo entre el euríbor y las hipotecas es muy estrecho, y por suerte o por desgracia, su aplicación únicamente se da en las hipotecas variables.
Las hipotecas variables se caracterizan, principalmente, por tener un tipo de interés compuesto. Se denomina así porque no es valor fijo, sino que se obtiene de la suma de un diferencial, que es siempre el mismo, y un índice de referencia (habitualmente, el euríbor) que puede evolucionar (en positivo o negativo) durante el periodo de amortización de la hipoteca.
Contar con un tipo de interés compuesto, y de un euríbor que evoluciona constantemente, hace que la cuota mensual de la hipoteca variable pueda subir o bajar cada cierto tiempo. A priori esto se nos puede presentar como una característica positiva que valoramos como algo beneficioso. La revisión de la cuota mensual, que fijará si pagamos lo mismo, más o menos, se produce tras una revisión periódica (la más habitual es cada seis o doce meses) para actualizarla en función del valor del euríbor.
A la hora de pensar en la solicitud de un préstamo hipotecario te recomendamos tener muy en cuenta lo que supone hacerlo con un tipo fijo o variable y que consultes la evolución del euríbor de la que puedes encontrar información en el BOE como en diferentes portales inmobiliarios y bancarios.
Si tienes una hipoteca y crees que tu entidad está cobrando más intereses de los que consideras que debiera cobrarte, no dudes en solicitar información. Si a nivel legal, necesitas asesoramiento, llámanos, te ofreceremos atención personalizada y especializada.