Nuda propiedad, una alternativa por la que optan muchos propietarios para obtener rendimiento por su vivienda, pero seguir residiendo en la misma hasta su fallecimiento.
¿Qué es la nuda propiedad?
La nuda propiedad es el derecho de una persona sobre un bien del que es propietario, pero con la limitación de no tener derecho a su posesión y disfrute, que son derechos de otra persona por corresponderle el usufructo.
Se llama nudo propietario a la persona titular de ese derecho. Es el dueño del bien, pero sus facultades sobre él están muy limitadas, ya que si no ostenta también el usufructo no podrá disfrutar del bien.
Es importante conocer las diferencias entre la nuda propiedad y el usufructo, te enlazo aquí algunas de las diferencias.
La nuda propiedad es una opción cada vez más demandada, sobre todo en el contexto de incertidumbre económica actual donde la inflación no cesa y que afecta también y de manera importante al mercado inmobiliario. Las propiedades vendidas en nuda propiedad se venden sin renunciar al derecho de uso y disfrute de las mismas, es decir, al usufructo, por parte de quien vende su propiedad.
Se trata de una alternativa por la que optan muchos propietarios para obtener rendimiento por su vivienda, y a la vez, poder seguir residiendo en la misma hasta su fallecimiento. Esto permite a los propietarios obtener ingresos sin perder su hogar y a los inversores, acceder a viviendas con un gran potencial de rentabilidad.
¿Cómo se adquiere la nuda propiedad?
La forma más habitual de adquisición de la nuda propiedad es a través de la herencia, cuando los herederos heredan la nuda propiedad de un inmueble reservándose el derecho de usufructo para el cónyuge viudo.
También es frecuente la adquisición de la nuda propiedad a través de la donación con reserva de usufructo, mecanismo a través del cual el donante transmite la nuda propiedad al donatario pero reservándose el usufructo vitalicio del bien.
Por último, es cada vez más habitual que el propietario de una vivienda venda la nuda propiedad y se reserve el usufructo. Las personas que optan por esta solución son normalmente personas mayores que no tienen herederos o necesitan recursos económicos. De esta forma, se aseguran el uso de la vivienda, generalmente vitalicio (durante toda su vida), y reciben una compensación económica.
¿Cuáles son las ventajas fiscales de la nuda propiedad?
Se trata de una opción interesante para las personas que quieran comprar sin prisa por entrar a vivir, porque pueden conseguir un inmueble a un precio más reducido, muchas veces entre un 40% y un 60% más barato. Y esto es así porque el comprador no puede utilizar y disfrutar de la vivienda adquirida hasta que se extinga el usufructo, que generalmente ocurre con el fallecimiento del vendedor.
Otro dato interesante para el comprador en nuda propiedad, es además de un precio notablemente más bajo de lo normal, el valor del inmueble que normalmente aumenta con el paso del tiempo.
Otras ventajas de la nuda propiedad es que es posible disfrutar de beneficios fiscales, como la exención del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP) si se trata de una vivienda habitual. También podrán deducirse parte del IRPF si se destina a la residencia usual. Interesante también es que por lo general, no tienes que hacerte cargo de los gastos derivados del uso y disfrute del inmueble, como el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), la comunidad de propietarios o los suministros, que habitualmente corresponden al usufructuario.
Fuente: 20minutos Conceptosjurídicos